Los niñ@s respondones suelen hacer que muchas veces los adultos perdamos la paciencia, pero sin embargo creo que no es más que una lucha por tener la última palabra. Algo que por norma creemos que nos debe ser otorgada a nosotros, los padres o madres.
Cuando yo estaba pequeña, era común contestar a los niñ@s con frases como «porque lo digo yo» o «porque sí», pero yo cada vez que mis hij@s preguntan «¿por qué?» suelo explicar las razones y es cierto que en muchas ocasiones me dejan sin argumentos.
Además de preguntar mucho porqué, los niñ@s suelen ser negociadores natos, si dices «en 5 minutos nos vamos», ellos dirán que mejor en 10 minutos y así con la comida, hora de dormir y muchas peticiones más…
Expertos aseguran que los niñ@s respondones tienen un desarrollo infantil saludable
Según he leído en un artículo de David Wolfe, los expertos consideran que este comportamiento es en realidad parte de un desarrollo infantil saludable. La psicóloga Kelly M. Flanagan explica que «la incapacidad para decir No e incapacidad de establecer límites personales, es una de las causas más comunes del sufrimiento humano».
Los niñ@s respondones quieren tener un poco de control sobre sus vidas. La negociación es una habilidad crítica de la edad adulta que necesitan desarrollar, y los niñ@s están practicando con sus padres y madres.
En el futuro esta capacidad de cuestionarlo todo les ayudará a tomar decisiones correctas en la edad adolescente, porque no son personas que sigan a ciegas lo que se les dice. Debido a que han sido capaces de desarrollar un pensamiento crítico, que les ayudará a hacer frente a la presión del grupo y decidir lo que es mejor para ellos.
Sin embargo, es importante que les inculquemos el respeto. La capacidad de negociar sus intereses debe ser siempre desde; el respeto, la tolerancia y la calma.
¿Por qué nos molestan los niños respondones?
¿Por qué nos molestan los niñ@s respondones?
Cuando los niñ@s son respondones, dudamos y en ocasiones nos sentimos inseguros sobre nuestro papel de padre o madre, porque muchas veces imponemos lo que nos han impuesto a nosotros de pequeños. Ellos nos hacen replantearnos el porqué de cada norma, ¿Por qué no puedo jugar un poco antes de irme a la cama? ¿Por qué debo ponerme esta ropa? Si lo pensamos, muchas veces nuestra respuesta interna es porque «así debe ser»…
El artículo explica que la mayoría de los padres y madres queremos tener el control en la relación, que ellos respondan como nosotros cuando éramos de su edad. «Sin embargo, se trata de una falsa sensación de control, pero los niños no están aquí para seguir órdenes y obedecer».
Los niñ@s de hoy en día tienen la necesidad natural de dar su opinión, al igual que nosotros lo hacemos constantemente.
Así que la próxima vez que les digas que «es hora de hacer algo» y respondan «por qué» o «ahora no», respira y piensa que tu respuesta ayuda a su desarrollo infantil y a ser adultos más exitosos, con un pensamiento crítico que les ayudará a tomar buenas decisiones en su futuro.
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