¿Están obsoletos los deberes de los niños de primaria?

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Empezamos el curso escolar y retomamos el tema del exceso de deberes de los niños de primaria, porque trabajar en casa después de la jornada escolar, está confirmado por expertos que hace más daño que bien, especialmente a edades tempranas.

Según una investigación realizada sobre si Mejoran los deberes el Rendimiento Académico (Does Homework Improve Academic Achievement?) publicada en TIME. El psicólogo y neurocientífico de la Universidad de Duke, Harris Cooper analizó los beneficios de los deberes. Su conclusión es que dependen de la edad: los estudiantes de Bachillerato se benefician si el trabajo es menos de dos horas, los estudiantes de la ESO o secundaria reciben un ligero refuerzo académico, y los niños de primaria no, él afirma que es mejor esperar.

Sin duda algo no está bien, y menos comparando con sistemas de países con mejores resultados en materia de educación, en el que a los se les enseña a través del juego, sin presión como en Finlandia.

Este país del norte de Europa tiene una jornada escolar de 20 horas a la semana y los niños en primaria no deben trabajar en casa. En el vídeo de abajo puedes escuchar a un profesor diciendo que «los deberes están obsoletos».

Algunos de los defensores de los deberes de los niños de primaria argumentan éstos ayudan a desarrollar el sentido de responsabilidad. Sin embargo, los estudios muestran que la responsabilidad recae sobre el padre y la madre.

El experto en educación Harris Cooper explica a Big Think acaba de publicar la tercera edición de su libro «The Battle Over Homework: Common Ground for Administrators, Teachers, and Parents», en el que ofrece pruebas convincentes de que los deberes en los niños pequeños son en realidad destructivos y lo que muestra en su investigación.

«The Battle Over Homework: Common Ground for Administrators, Teachers, and Parents» de Harris Cooper

«Los deberes hacen que sea difícil para los niños pequeños para adaptarse al colegio y la educación tiene que ser divertida».

Después de la jornada escolar de ocho horas, los peques necesitan descansar y tiempo para ser niños: jugar, divertirse, relajarse, ayudar en tareas familiares e ir a la cama pronto.

Los niñ@s son seres humanos increíbles que están aprendiendo constantemente a una velocidad que a los adultos nos asombra. ¿Por qué les robamos el poco tiempo que tienen para disfrutar de la infancia?

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