Día Mundial del Sueño Feliz




Papás e hijos se une a la iniciativa que han propuesto un grupo de mamás y papás bloguer@s, tuiter@s, y facebooker@s de celebrar hoy 29 de junio el primer Día Mundial del Sueño Feliz.

Y tras celebrar una charla con Rosa Jové psicóloga infantil especialista en el tema de sueño infantil y autora del libro «Dormir sin lágrimas», creo que es importante citar una de las frases que nos dijo «Nadie puede obligar a un niño a que duerma como un adulto, ni a una adulto a que duerma como un bebé».

Muchos estudios señalan que todos, bebés, niños y adultos, nos despertamos varias veces en la noche, pero sólo los más mayores dominamos la técnica de volver a dormirnos. Es una cuestión de tiempo que lo hagan los bebés, porque según la experta Rosa Jové, dormir es un proceso evolutivo.

En cuanto a métodos para dormir a los bebés, nos explicó que son métodos de adiestramiento y que el conocido libro de Estivill Duérmete niño escrito en 1995 tiene las mismas tablas de tiempos que desarrolló Benjamin Spock en su obra escrita en 1946 «El libro del sentido común del cuidado de bebés y niños».

Benjamin Spock era partidario de un método que inglés se llama «Cry it out», que aconseja a los padres que a partir de los 3 meses, deben dejar al bebé en su cuna y no mirar atrás. Por lo general, a la tercera noche de llanto sin control, el bebé comenzará a dormir por sí mismo. Spock dijo que la mayoría de los bebés lloran durante un máximo de 30 minutos en la primera noche, para luego darse cuenta que no estamos llegando a ningún lado, y se quedan dormidos.

Lamentablemente Spock no fue el único, Bernard Valman en su libro «ABC of One to Seven», publicado en 1982, muestra la tabla que aparece a continuación.

 

Bernard Valman
 

Richard Ferber en 1985 lo llama método de entrenamiento pavloviano, como el que usaba Pavlov con su perro para la asociación de estímulos, que si quieres que alguien aprenda algo no hay nada mejor que hacerlo salivar antes y esto aplicado a los bebés.

Y luego en 1995 Eduard Estivill nos propone las misma tablas de Benjamin Spock.

Y sí, estos métodos de adiestramiento funcionan, pero Rosa Jové nos explica porqué dan resultados y es porque generan estrés al bebé, porque sube la adrenalina y cortisol, que van a la amigdala y se segregan opiaceos y serotonina, por lo que el niñ@ duerme porque está sedado, no aprende nada y pasa mucho miedo.

Entender que el sueño de los bebés es un proceso evolutivo es clave para los papás y mamás, así podemos estar más tranquilos y en caso de pensar que hay un problema, lo más recomendado es acudir a los profesionales para que lleven a cabo un diagnóstico del posible trastorno y utilizar un tratamiento adecuado.

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Daniela

About Daniela

Desde hace varios años trabajo online para poder conciliar mi vida familiar y laboral. Además de ser la autora de Papás e hijos, para muchos soy más conocida como la mamá de... y feliz de serlo!

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